María y Esteban pronto se darán el “sí quiero” y queda mucho por hacer. Por suerte la sesión preboda es uno de los preparativos más divertidos, y además nos dio la oportunidad de conocernos mejor para que cuando llegase el gran día, estuviésemos en perfecta sintonía.
Nos lo pasamos muy bien en esta sesión realizada en Port Saplaya, que con su puerto y sus casitas de cuento es el lugar perfecto para una sesión bonita y romántica.